Desde un punto de vista inclusivo, son aquellos alumnos con necesidades educativas especiales aquellos que más adaptaciones requieren a la hora de que la inlusión se haga efectiva dentro del aula. Por ello, en esta entrada quiero hablar de los recursos materiales, sobre todo de aquellos que más tienen que ver con la atención a la diversidad.
La LOE, ratificada por la LOMCE, en su artículo 71, en el apartado 2, nos especifica lo siguiente:
"Corresponde a las administraciones educativas asegurar los recursos necesarios para que los alumnos y alumnas que requieren una atención educativa diferente a la ordinaria, puedan alcanzar el máximo desarrollo posible de sus capacidades personales y, en todo caso, los objetivos establecidos con carácter general para todo el alumnado"
Es muy importante tener en cuenta, a la hora de seleccionar el material curricular para un alumno con nee, partir del nivel de competencias y no del hecho de que, por presentar una discapacidad determinada, se deben usar unos recursos preestablecidos.
Existen distintos tipos de materiales. Según los destinatarios nos podemos encontrar materiales destinados al profesorado y materiales destinados al alumnado y, según el soporte y la modalidad simbólica del material, Castro de Paz y Área Moreira (1997), hacen la siguiente clasificación:
- Medios manipulativos
- Medios textuales e impresos
- Medios audiovisuales
- Medios auditivos
- Medios informáticos.
Para terminar, quiero hacer hincapié en que todos los materiales curriculares han de considerarse como una experiencia divertida y excitante, ya que transmiten contenidos y conocimientos, promueven valores y actitudes y contribuyen al desarrollo de las habilidades cognitivas. Y, aunque los medios y recursos materiales constituyen un factor fundamental para la atención a la diversidad, son los recursos humanos disponibles, el factor decisivo para el desarrollo y el aprendizaje de todo el alumnado. Por este motivo y por otros más, en la siguiente entrada hablaré de ellos.
Un saludo y hasta la próxima.